YA ESTAMOS A LAS PUERTAS DE LA NAVIDAD
Ya estamos a las puertas de la Navidad, el viernes próximo la celebraremos con mucho gozo; sí, con mucho gozo y agradecimiento a nuestro gran Dios que se quiso hacer muy pequeñito, uno de nosotros.
Hay muchos que piensan que el virus nos va a estropear estas fiestas, ya que no podrán tener lugar las grandes reuniones familiares. Pero es que quizá tenemos un poco desfigurada la Navidad, porque una cosa es celebrar la unión familiar en Navidad y otra celebrar la Navidad en unión familiar; aquí el orden en que pongamos una cosa o la otra tiene mucha importancia. Para los creyentes es evidente que lo importante es la celebración de la Navidad, si podemos hacerlo todos juntos, pues estupendo, pero si por las circunstancias que sean, esta vez el covi, no podemos reunirnos ¡no por eso deja de ser Navidad!.
Qué bueno es detenerse en el pasaje evangélico que nos relata la primera Navidad de la Historia. Al lado del Niño no estaban más que María y José; no había otros familiares, ni una buena mesa, ni regalos…todo era tan simple y sencillo. Hace bien estar con ellos en Belén, en silencio, contemplando y admirando los caminos de Dios, que quiso eso para el nacimiento de su Hijo. Algo nos querrá decir esa Natividad en el portal de Belén. Quizá este año sea bueno que celebremos este Misterio con más sobriedad y sencillez, poniendo toda la fuerza en la enorme importancia de eso que celebramos: El vino para quedarse ya para siempre con nosotros.
FELIZ NATIVIDAD DE JESÚS, CON MARÍA Y JOSÉ
Hermanas Carmelitas
