Y ya estamos en Semana Santa
Y ya estamos en Semana Santa, donde celebraremos los Misterios fundamentales de nuestra fe cristiana. Nos hemos venido preparando y disponiendo durante la Cuaresma, ahora que con la ayuda del Espíritu Santo podamos entrar de veras en las celebraciones y salgamos de esta Semana fortalecidos en nuestro amor a Cristo y en esperanza de su salvación con una fe firme y perseverante.
Teresa de Jesús se convirtió de su vida dividida entre Dios y el mundo, ante una imagen de «Cristo muy llagado». Desde entonces no dejará más la compañía de este Cristo, y eso mismo nos aconseja en muchas partes de sus escritos, como éste :
«¡Oh Señor del mundo, verdadero Esposo mío! (le podéis decir si se os ha enternecido el corazón de verle tal, que no sólo queráis mirarle, sino que os holguéis de hablar con El, no oraciones compuestas, sino de la pena de vuestro corazón, que las tiene El en muy mucho), ¿tan necesitado estáis, Señor mío y Bien mío, que queréis admitir una pobre compañía como la mía, y veo en vuestro semblante que os habéis consolado conmigo? ¿Pues cómo, Señor, es posible que os dejan sólo los ángeles, y que aun no os consuela vuestro Padre? Si es así, Señor, que todo lo queréis pasar por mí, ¿Qué es esto que yo paso por Vos?, ¿De qué me quejo? Que ya tengo vergüenza de que os he visto tal, que quiero pasar, Señor, todos los trabajos que me vinieren y tenerlos por gran bien por imitaros en algo. Juntos andemos, Señor; por donde fueréis tengo que ir, por donde pasareis, tengo que pasar. Mirad mucho el cansancio con que va y las ventajas que hace su trabajo a los que vos padecéis; por grandes que los queráis pintar y por mucho que los queráis sentir, saldréis consoladas de ellos porque veréis son cosa de nada comparados a los del Señor»
Os deseamos una muy plena participación en las celebraciones de esta Semana que actualizan para cada uno todo el Misterio de la entrega total de Cristo por nosotros.
Hermanas Carmelitas