Rincon Carmelitano

DE UNA CARTA DE SANTA TERESITA DE LISIEUX A SU HERMANA CELINA

  (Celina iba entrar en el Carmelo, y algunos de sus familiares no lo comprende,) por lo que ella le escribe: » No me sorprende la tempestad que ruge en Caén, (su prima Juana y su marido) han escogido un camino tan diferente del nuestro, que no pueden comprender la sublimidad de nuestra vocación… Pro ríen bien los que ríen los últimos…Después de esta vida de un día, comprenderán quiénes, si nosotras o ellos, fueron los más privilegiados…

  Me alegra mucho, mi querida hermana, de que no sientas atractivo sensible al venir al Carmelo, es eso una delicadeza de Jesús, que quiere recibir de ti un presente. Sabe que es más dulce dar que recibir. Sólo tenemos el corto instante de la vida para dar a Dios…Y Él se apresta ya a decir: ahora me toca a mí ¡Qué dicha sufrir por aquel que nos ama hasta locura y pasar por locas a los ojos del mundo! ¡Mas al fin de cuentas, no somo nosotras las primeras! El solo crimen reprochado a Jesús por Herodes fue la de estar loco…, ¡y yo pienso como él! Sí, lo estaba, de la locura de buscar a los pobrecitos corazones de los mortales para convertirlos en tronos suyos. ¡El, el Rey de la gloria, que está sentado por encima de los querubines! El, cuya presencia no pueden contener los cielos. Estaba loco nuestro Amado para venir a tierra a buscar a los pecadores y hacer de ellos sus amigos, sus íntimos, sus semejantes. ¡El, que era perfectamente feliz con las adorables Personas de la Trinidad! …Nosotras no podremos nunca hacer por Él las locuras que Él hizo por nosotras, y nuestras acciones no merecen este nombre, porque son actos muy razonables y muy debajo de lo que nuestro amor quisiera realizar. Es, pues, el mundo el insensato, puesto que ignora lo que Jesús hizo por salvarlo, es él el acaparador que seduce a las almas y las  lleva a fuente sin agua.

 Está como escrito para nosotras: los cristianos más fervorosos, los sacerdotes, juzgan que somos exageradas, que deberiamos servir con Marta, en lugar de consagrar a Jesús los vasos de nuestras vidas con los perfumes que en ellos están cerrados.   ( De la Carta 148 )

                              HERMANAS CARMELITAS

Comentarios cerrados.