Rincon Carmelitano

LA MISERICORDIA: HISTORIA DE DIOS CON TERESA DE JESÚS.

Digo con seguridad que, cuando Teresa habla de sus pecados, no lo dice con un libro de moral manos o en su mente, sino a la luz de su experiencia de ser amada siempre gratuita, misericordia por Dios. Teresa queda confundida por la persistente paciencia y misericordia de un Dios tan amoroso desbordante con ella escribe: «Pues para lo que he tanto he contado esto es, como ya he dicho, para que se vea la misericordia de Dios y mi ingratitud; lo otro, ( soldadura argumental necesaria) » para que se entienda el gran bien que hace Dios a un alma que la dispone para tener oración mental=amistad, con voluntad, aunque no esté tan dispuesta como es menester, y cómo si ella persevera, por pecados y tentaciones y caídas que tenga, la saca Dios a puerto de salvación, como, a lo que ahora parece me ha sacado a ,í ( V 8, 4)

  Teresa da claramente a entender que solo en la oración, en el trato amistoso con Dios, se aprende la verdad de Dios, quién es el que siempre me daba la mano, y muchas veces me llamabais de nuevo.

   Ella está de acuerdo en la constatación de las muchas gracias recibidas de Dios y que su vida no respondía todavía a ellas: «yo, aunque en las mercedes de Dios estaba muy adelante, estaba muy a los principios en las virtudes y mortificación» (V 23, 9) El desacuerdo es total en la imagen de Dios que experimenta la monja carmelita. Para éstos, Dios viene detrás premiando méritos; para ella Dios precede con su gracias para que podamos liberarnos de una conducta negativa y entrando en una relación de amistad creciente con Dios.

                      HERMANAS CARMELITAS

Comentarios cerrados.