Editorial

¡Nuestros mayores, un tesoro para la Iglesia!

Este domingo celebramos la IV Jornada Mundial de las Personas Mayores. Y qué mejor ocasión para reconocer y agradecer la invaluable contribución de nuestros mayores a nuestra comunidad cristiana.

En Villar del Arzobispo, como en muchas otras localidades, nuestras parroquias están conformadas en gran medida por personas mayores. Y esto no es una casualidad, sino un signo de esperanza y alegría. Porque en la vejez reside una riqueza inmensa: la experiencia, la sabiduría acumulada a lo largo de una vida vivida con fe, esperanza y caridad.

El lema de esta jornada, «en la vejez no me abandones», nos invita a reflexionar sobre la fecundidad de la edad. La edad no es un impedimento para seguir creciendo en la fe, para seguir siendo discípulos misioneros de Jesús. Al contrario, la experiencia vivida nos permite ser testigos creíbles del amor de Dios en medio del mundo.

Sin embargo, sabemos que muchos de nuestros mayores se han ido alejando de la Iglesia. Quizás por las dificultades de la vida, por los cambios en la sociedad o simplemente por la rutina. Pero queremos invitarlos a regresar a nuestra casa común, a reencontrarse con esa alegría que sintieron en su juventud al vivir su fe sin prejuicios ni miedos.

En Villar del Arzobispo tenemos una comunidad de mayores con una gran riqueza espiritual. Sus vidas son un testimonio de fe, de esperanza y de amor. Y queremos que se sientan queridos, valorados y acompañados.

Pidamos la intercesión de San Joaquín y Santa Ana, los padres de la Virgen María y abuelos de Jesús, para que nuestros mayores puedan seguir dando frutos en la vejez, y para que nuestra comunidad cristiana sea cada vez más acogedora y solidaria con todos sus miembros.

¡Ven y celebra con nosotros!

Comentarios cerrados.