EL AMOR DE DIOS NOS INVITA A SALIR DE NOSOTROS PARA APOYARNOS EN ÉL Y DESDE ÉL ABRINOS A LOS DEMÁS
(Santa Teresita del Niño Jesús)
La confianza en la misericordia de Dios nos puede librar de perfeccionismos centrados en nosotros mismos.
Muchas veces nos preocupamos, sobre todo, por nuestras faltas. Teresita nos avisa que lo que más nos aparta de Dios, lo que le ofende a Jesús, lo que hiere su corazón es ¡ la falta de confianza…! (Carta 30) La perfección que Él pide es vivir desde su misericordia, practicarla: «sed misericordiosos» (Lc. 6) Y la experiencia que tiene Teresa del amor de Dios, la libera de preocuparse demasiado por sus propios defectos y logros. Su atención se centrará, más bien, en Jesús, para seguirlo y amarle, y en acudir a las necesidades de los demás; en ser, para ellos, transmisora del amor de Dios.
La confianza en la misericordia de Dios nos puede librar de perfeccionismos centrados en nosotros mismos. El amor de Dios nos invita a salir de nosotros para apoyarnos en Él y desde Él abrirnos a los demás. A recorrer, así, los caminos que Él va abriendo en nuestra vida «La perfección consiste en hacer la voluntad de Dios, en ser lo que Él quiera que seamos»
Teresita, nos dice que es fácil agradar a Jesús, cautivar su corazón! Lo único que hay que hacer es amarle sin mirarse a sí mismo y sin examinar demasiado los propios defectos…