Rincón Carmelitano

FE  EN  BELÉN

María permaneció, junto a su prima Isabel, hasta dar a luz. Cuando su presencia ya no era necesaria como lo había sido hasta entonces, María regresó a su casa, Nazareth, a la espera de acontecimientos, con la confianza total puesta en Dios, que nunca abandona al que pone en Él toda su esperanza.

Pero algo que parecía fácil, se complica. Un censo, promulgado por el emperador, trastoca de raíz las ilusiones de la joven pareja. José desciende de Belén y tiene que ir allí a empadronase. Bien sabe que María no está ahora para este viaje de varias jornadas de camino, pero hay que ponerse en marcha. Y así lo hace.

 Aceptar los planes de Dios, sean los que sean. Porque María intuye que su sí se va haciendo realidad en la confianza. María nos recuerda que, aceptar los planes de Dios, supone dejar la comodidad de lo conocido, la seguridad del camino andado, supone dejar el «hogar calentito» y salir a la intemperie donde los vientos soplan fuerte y donde puede hacer frío. Se trata de confiar y abandonarse, como Ella lo hizo, de ponerse en camino.

Aceptar que la Fe es arriesgar.  Y que uno puede ser rechazado. Nos pueden cerrar las puertas y eso duele. María y José vivieron la amarga experiencia de la falta de acogida. Entonces la fe fortalece para seguir creyendo en la adversidad y sortear los mares tempestuosos. La duda y la noche forman parte de la fe.

Aceptar que Dios se encarna en lo sencillo. En unos pastores que cuidan sus rebaños. Ellos son los que reciben el primer anuncio, los que se ponen en camino y los que son capaces de descubrir lo que, a los ojos, no se ve. La sencillez descubre el misterio.

 La fe nos descubre caminos nuevos, confianzas nuevas, esperanzas nuevas. Con ella vemos la realidad de manera distinta. Cuando se conoce a Jesús y se le acepta empezamos una nueva vida, otra historia. Y como los magos, ya no es posible volver a los caminos de antes. Si Jesús  ha llenado nuestro corazón, nuestra vida se manifestará en un ser y actuar distintos. Estos caminos nuevos los descubre la Fe.

  ¡¡¡ FELIZ Y SANTA NAVIDAD PARA TODOS !!!

 Hermanas Carmelitas

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