NAZARET O LA GRANDEZA DE LAS COSAS PEQUEÑAS
Nazaret: el hogar de la familia de José, María y Jesús. Durante muchos años, su casa, su hogar, su tempo, donde se » fue cocinando una bella historia». Allí se mezclaron el trabajo y la oración, la humanidad y la divinidad. Tiempo de siembra generosa y espera de cosecha fecunda.
Nazaret, Dios se oculta y se abaja. En Nazaret bebe de nuestras fuentes, convive con el trabajo y el esfuerzo, con la vida y la muerte, con las esperanzas frustradas de un pueblo, con una ocupación que oprime, con una religión que no libera, con un Dios, para muchos lejano.
María de Nazaret nos enseña LA SECILLEZ DE DIOS, el valor de lo pequeño y de lo que no cuenta. Nos propone la importancia de la espera, de dar tiempo, de entregarse a fondo perdido, de empezar a comprender los caminos de Dios.
Nazaret purifica, nos purifica de grandezas soñadas, de proyectos que no comprometen, y nos vuelve a la tierra, a pisar el polvo de la realidad dura y bella de la vida.
María de Nazaret, desde el silencio, nos invita a vivir de fe de manera auténtica. Nazaret es un grito reivindicativo dela grandeza de lo pequeño.
Feliz Domingo de la Sagrada Familia.
Y Feliz año 2025, que lo empezamos de mano de María; su Maternidad, dejémonos acompañar por Ella.
Hermanas Carmelitas